Son accesorios que se acoplan a las suelas de las botas de invierno para aumentar el agarre al suelo cubierto de nieve o bien hielo.
Ciertos incluyen dos bandas de cierre que garantizan que los zapatos no se deslicen, asisten en las subidas y aumentan la seguridad al caminar.
Sírvase de ellos donde hay musgo de barro y hojas, al ir a talar árboles, para la caminata anual de invierno en senderos helados.
Con el paso del tiempo los crampon o que significa se vuelven una necesidad en la vida cotidiana, para no andar patinando con peligro a caídas.
Anteriormente eran llamados grappetes y vienen evolucionando desde hace más de cien años, cuando fueron inventados y utilizados por cazadores y leñadores europeos.
Los de aluminio son más ligeros, ideales para largas aproximaciones en nieve, para esquí de travesía o para salidas rápidas y no muy técnicas.
Cuentan con diferentes formas y materiales de fijación, lo que deja un buen agarre y que se ajusten a la perfección a cualquier tipo de calzado.
Los de doce puntas aparecen cuando se añade a los diseños la nueva técnica de 2 puntas frontales, que entonces permiten mejor agarre.